SEPTIEMBRE 5, 2023

Del Grano de Café al Éxito P.1

Starbucks:  Una revolución de la cultura del café,
que potencia comunidades

GABRIEL SARTI

LOGO DE STARBUCKS

Café y Narrativas de Marca

Si tuvieras que pasar una larga temporada en una isla desierta, ¿qué llevarías contigo? ¿Tu libro favorito? ¿Algún equipo para escuchar música? ¿Fotos de tus seres queridos? Quizás las tres cosas a la vez, ¿por qué no? Ahora, si me preguntan a mí, yo me llevaría mi cafetera italiana, y una larga reserva de café molido para preparar. Y es que, al igual que otras mil millones de personas en el mundo, lo primero que hago al abrir los ojos es prepararme una buena taza de café, que me ayude a transitar el día. 

Y es que, aunque parezca superficial, esta bebida, que según cuenta la leyenda, fue descubierta de casualidad por un pastor etíope llamado Kaldi, en el S. IX DC, ha evolucionado hasta convertirse en un elemento crucial en el día a día de cualquier persona en la actualidad. Y junto a esta evolución, distintas marcas y distintas narrativas han surgido para, a través del mismo producto, ofrecernos distintas experiencias.

Por eso, y siguiendo un poco la línea de nuestra última entrada en donde analizamos qué es el Brand Story y el Brand Storytelling (si aún no lo has leído, pincha aquí), aquí, y en las próximas 2 entradas, analizaré 3 empresas que, en un mercado tan competitivo como lo es el del café, han sabido, desde distintos lugares, y apuntando a distintas audiencias, construir grandes narrativas en torno a ellas, hasta convertirse en verdaderas marcas de éxito:

Starbucks, la marca que nació en Seattle y se expandió por todo el planeta, trascendiendo la mera taza de café, para convertirse en un espacio para la comunidad y la conexión; Nespresso, que con su origen Suizo, ha convertido a la elaboración del café en arte de precisión, para los paladares más sofisticados; y por último, Black Rifle Coffee Company, hecho por y para veteranos de guerra, lo que le aporta un toque patriótico y robusto, algo bastante novedoso para el universo del café. 

Así que antes de sumergirnos de lleno en el análisis, prepárate una buena taza (un chorrito de leche y 2 de azúcar), porque hoy, en The Brand Cuisine, hablamos de café y de manera más específica, de Starbucks.

PRODUCTO ESTRELLA DE STARBUCKS

Starbucks: El Origen de una Marca

Con presencia en 80 países, y más de 35 mil locales en todo el mundo, Starbucks es, sin lugar a dudas, un “Coloso” en el mercado del café. Aunque es indiscutible que sus productos, que van mucho más allá de esta bebida, son particularmente sabrosos, la pregunta central en este análisis sigue presente: ¿cómo una empresa, que comenzó como un pequeño emprendimiento de 3 amigos, en la ciudad de Seattle, en 1971, consiguió convertirse en el emporio global que es hoy en día?

Para poder contestar a esta pregunta, primero debemos conocer un poco la historia que le da origen a esta marca. A finales de los años 60’s y principios de los 70’s, muchos americanos tenían la sensación de que su experiencia en el consumo de café era bastante pobre; consideraban que habían muy pocas opciones disponibles en el mercado, y que todas era de muy baja calidad. Además, debido a los cambios culturales de esa época, el público empezaba a mostrar un interés creciente en la salud y la sostenibilidad de los alimentos que consumían.

En este contexto, 3 amigos de la ciudad de Seattle, Gordon Bowker, Jerry Baldwin y Zev Siegl, decidieron abrir una tienda boutique (el primer Starbucks de la historia) en la cual vender, al público general, entre otras cosas, granos de café de alta calidad, recién tostados y molidos. Aunque pueda parecernos extraño hoy en día, en este primer Starbucks no vendía ningún tipo de bebidas, ni siquiera una taza de café. Y es que en aquel entonces,  la cultura del café en Estados Unidos estaba orientada hacia el consumo en el hogar y en el lugar de trabajo, por lo que no eran habituales ni las cafeterías, ni el el acto mismo de ir a un establecimiento sólo para beber café (vale destacar que la gente sí bebía café en establecimientos, pero normalmente lo hacía en restaurantes o Diners , como parte final de una comida).

El modelo de negocio de Starbucks no comenzaría a tomar forma sino a partir de 1983 cuando Howard Schultz, quien primero trabajó como Director de Operaciones y Marketing, y más tarde terminaría comprando la marca, viajó a la ciudad italiana de Milán. Allí Schultz descubrió una cultura del café radicalmente distinta a la que él estaba acostumbrado en Estados Unidos. No sólo era el hecho de que la ciudad estaba repleta de pequeños cafés, sino que estos establecimientos ofrecían mucho más que una simple bebida con la cual energizarse; cumplian un rol social, una suerte de “ágora” moderna, en donde familiares, amigos y conocidos se reunían para conversar, debatir, disertar, conectar, o simplemente compartir momentos.

TIENDA DE STARBUCKS EN 1977

Café y Comunidad: La Esencia detrás del éxito

Con esto en mente, Schultz transformaría para siempre la esencia misma de Starbucks, pasando de ser un simple retailer de café tostado y molido de calidad, para convertirse en un espacio de reunión y de encuentro, en compañía de las mejores y más sabrosas bebidas del mercado (tés, cafés, malteadas, etc), al tiempo que daba inicio a una revolución en la cultura del café en los Estados Unidos, que persiste hasta nuestros días.

Dicho todo esto, y volviendo a la pregunta del inicio, podemos decir, de manera categórica, que el éxito de Starbucks no se encuentra ni en su café, ni en los granos que usa… Ni siquiera en cuán sabrosos son o dejan de ser sus croissants o cupcakes, que por supuesto tienen su incidencia. No, el éxito de esta marca es que han sabido vender, y con mucho éxito, algo mucho más valioso para los consumidores actuales, que una taza de café: Starbucks vende, por sobre todas las cosas, una experiencia. En un mundo en donde el frenesí está a la orden del día, y en el que todos nos encontramos cada vez más atomizados, Starbucks se presentan como una suerte de “oasis”, de “refugio” en medio de esta vorágine, en donde los relojes ya no controlan de forma tirana nuestras vidas, y en donde podemos permitirnos el tiempo de conectar, no solo con nuestros seres queridos, sino también con nuestra comunidad.

Esta es la razón de ser y el motivo del éxito de Starbucks. Y si uno presta la suficiente atención, se dará cuenta de que todas las acciones llevadas adelante por esta marca están enfocadas en 2 objetivos al mismo tiempo. El primero, en hacer de estos “oasis” o “refugios”, lo más confortables posibles, mediante una cuidadosa selección y disposición del mobiliario; una elección meticulosa de la música, para crear un ambiente cálido y que nos haga sentir bienvenidos; el uso del aroma a café tostado (aunque en sus locales ya no se tuesta el café), para darnos esa sensación de que nos encontramos en un establecimiento que ofrece productos “caseros”; etc. Y el segundo objetivo, en subrayar la idea de Starbucks como creador y potenciador de comunidades, mediante su política de “puertas abiertas” con la cual, cualquier persona que ingresa a alguno de sus locales, consuma o no, es considerada “cliente”; su política de contratación, la cual busca promover la inclusión y diversidad entre sus empleados;  sus programas de colaboración con comunidades agrícolas cafeteras, como las C.A.F.E. PracticesGranos de Esperanza, las cuales, al mismo tiempo, les permite seguir trabajando esa idea original de una empresa dedicada a la salud y el cuidado del medioambiente; etc.

Aunque muchas cosas han cambiado en la construcción de marca, desde sus orígenes, hasta la actualidad, es indiscutible que Starbucks ha sabido hacer una propuesta atractiva e innovadora, ya no solo para el público de los Estados Unidos, sino a nivel global, permitiéndole convertirse en el “Gigante del café” que es hoy en día.

ANUNCIO «GRANOS DE ESPERANZA»

SEPTIEMBRE 5, 2023

Del Grano de Café al Éxito P.1

Starbucks:  Una revolución de la cultura del café, que potencia comunidades

GABRIEL SARTI

LOGO DE STARBUCKS

Café y Narrativas de Marca

Si tuvieras que pasar una larga temporada en una isla desierta, ¿qué llevarías contigo? ¿Tu libro favorito? ¿Algún equipo para escuchar música? ¿Fotos de tus seres queridos? Quizás las tres cosas a la vez, ¿por qué no? Ahora, si me preguntan a mí, yo me llevaría mi cafetera italiana, y una larga reserva de café molido para preparar. Y es que, al igual que otras mil millones de personas en el mundo, lo primero que hago al abrir los ojos es prepararme una buena taza de café, que me ayude a transitar el día. 

Y es que, aunque parezca superficial, esta bebida, que según cuenta la leyenda, fue descubierta de casualidad por un pastor etíope llamado Kaldi, en el S. IX DC, ha evolucionado hasta convertirse en un elemento crucial en el día a día de cualquier persona en la actualidad. Y junto a esta evolución, distintas marcas y distintas narrativas han surgido para, a través del mismo producto, ofrecernos distintas experiencias.

Por eso, y siguiendo un poco la línea de nuestra última entrada en donde analizamos qué es el Brand Story y el Brand Storytelling (si aún no lo has leído, pincha aquí), aquí, y en las próximas 2 entradas, analizaré 3 empresas que, en un mercado tan competitivo como lo es el del café, han sabido, desde distintos lugares, y apuntando a distintas audiencias, construir grandes narrativas en torno a ellas, hasta convertirse en verdaderas marcas de éxito:

Starbucks, la marca que nació en Seattle y se expandió por todo el planeta, trascendiendo la mera taza de café, para convertirse en un espacio para la comunidad y la conexión; Nespresso, que con su origen Suizo, ha convertido a la elaboración del café en arte de precisión, para los paladares más sofisticados; y por último, Black Rifle Coffee Company, hecho por y para veteranos de guerra, lo que le aporta un toque patriótico y robusto, algo bastante novedoso para el universo del café. 

Así que antes de sumergirnos de lleno en el análisis, prepárate una buena taza (un chorrito de leche y 2 de azúcar), porque hoy, en The Brand Cuisine, hablamos de café y de manera más específica, de Starbucks.

PRODUCTO ESTRELLA DE STARBUCKS

Starbucks: El Origen de una Marca

Con presencia en 80 países, y más de 35 mil locales en todo el mundo, Starbucks es, sin lugar a dudas, un “Coloso” en el mercado del café. Aunque es indiscutible que sus productos, que van mucho más allá de esta bebida, son particularmente sabrosos, la pregunta central en este análisis sigue presente: ¿cómo una empresa, que comenzó como un pequeño emprendimiento de 3 amigos, en la ciudad de Seattle, en 1971, consiguió convertirse en el emporio global que es hoy en día?

Para poder contestar a esta pregunta, primero debemos conocer un poco la historia que le da origen a esta marca. A finales de los años 60’s y principios de los 70’s, muchos americanos tenían la sensación de que su experiencia en el consumo de café era bastante pobre; consideraban que habían muy pocas opciones disponibles en el mercado, y que todas era de muy baja calidad. Además, debido a los cambios culturales de esa época, el público empezaba a mostrar un interés creciente en la salud y la sostenibilidad de los alimentos que consumían.

En este contexto, 3 amigos de la ciudad de Seattle, Gordon Bowker, Jerry Baldwin y Zev Siegl, decidieron abrir una tienda boutique (el primer Starbucks de la historia) en la cual vender, al público general, entre otras cosas, granos de café de alta calidad, recién tostados y molidos. Aunque pueda parecernos extraño hoy en día, en este primer Starbucks no vendía ningún tipo de bebidas, ni siquiera una taza de café. Y es que en aquel entonces,  la cultura del café en Estados Unidos estaba orientada hacia el consumo en el hogar y en el lugar de trabajo, por lo que no eran habituales ni las cafeterías, ni el el acto mismo de ir a un establecimiento sólo para beber café (vale destacar que la gente sí bebía café en establecimientos, pero normalmente lo hacía en restaurantes o Diners , como parte final de una comida).

El modelo de negocio de Starbucks no comenzaría a tomar forma sino a partir de 1983 cuando Howard Schultz, quien primero trabajó como Director de Operaciones y Marketing, y más tarde terminaría comprando la marca, viajó a la ciudad italiana de Milán. Allí Schultz descubrió una cultura del café radicalmente distinta a la que él estaba acostumbrado en Estados Unidos. No sólo era el hecho de que la ciudad estaba repleta de pequeños cafés, sino que estos establecimientos ofrecían mucho más que una simple bebida con la cual energizarse; cumplian un rol social, una suerte de “ágora” moderna, en donde familiares, amigos y conocidos se reunían para conversar, debatir, disertar, conectar, o simplemente compartir momentos.

TIENDA DE STARBUCKS EN 1977

Café y Comunidad: La Esencia detrás del éxito

Con esto en mente, Schultz transformaría para siempre la esencia misma de Starbucks, pasando de ser un simple retailer de café tostado y molido de calidad, para convertirse en un espacio de reunión y de encuentro, en compañía de las mejores y más sabrosas bebidas del mercado (tés, cafés, malteadas, etc), al tiempo que daba inicio a una revolución en la cultura del café en los Estados Unidos, que persiste hasta nuestros días.

Dicho todo esto, y volviendo a la pregunta del inicio, podemos decir, de manera categórica, que el éxito de Starbucks no se encuentra ni en su café, ni en los granos que usa… Ni siquiera en cuán sabrosos son o dejan de ser sus croissants o cupcakes, que por supuesto tienen su incidencia. No, el éxito de esta marca es que han sabido vender, y con mucho éxito, algo mucho más valioso para los consumidores actuales, que una taza de café: Starbucks vende, por sobre todas las cosas, una experiencia. En un mundo en donde el frenesí está a la orden del día, y en el que todos nos encontramos cada vez más atomizados, Starbucks se presentan como una suerte de “oasis”, de “refugio” en medio de esta vorágine, en donde los relojes ya no controlan de forma tirana nuestras vidas, y en donde podemos permitirnos el tiempo de conectar, no solo con nuestros seres queridos, sino también con nuestra comunidad.

Esta es la razón de ser y el motivo del éxito de Starbucks. Y si uno presta la suficiente atención, se dará cuenta de que todas las acciones llevadas adelante por esta marca están enfocadas en 2 objetivos al mismo tiempo. El primero, en hacer de estos “oasis” o “refugios”, lo más confortables posibles, mediante una cuidadosa selección y disposición del mobiliario; una elección meticulosa de la música, para crear un ambiente cálido y que nos haga sentir bienvenidos; el uso del aroma a café tostado (aunque en sus locales ya no se tuesta el café), para darnos esa sensación de que nos encontramos en un establecimiento que ofrece productos “caseros”; etc. Y el segundo objetivo, en subrayar la idea de Starbucks como creador y potenciador de comunidades, mediante su política de “puertas abiertas” con la cual, cualquier persona que ingresa a alguno de sus locales, consuma o no, es considerada “cliente”; su política de contratación, la cual busca promover la inclusión y diversidad entre sus empleados;  sus programas de colaboración con comunidades agrícolas cafeteras, como las C.A.F.E. PracticesGranos de Esperanza, las cuales, al mismo tiempo, les permite seguir trabajando esa idea original de una empresa dedicada a la salud y el cuidado del medioambiente; etc.

Aunque muchas cosas han cambiado en la construcción de marca, desde sus orígenes, hasta la actualidad, es indiscutible que Starbucks ha sabido hacer una propuesta atractiva e innovadora, ya no solo para el público de los Estados Unidos, sino a nivel global, permitiéndole convertirse en el “Gigante del café” que es hoy en día.

ANUNCIO «GRANOS DE ESPERANZA»

SEPTIEMBRE 5, 2023

Del Grano de Café al Éxito P.1

Starbucks:  Una revolución de la cultura del café, que potencia comunidades

GABRIEL SARTI

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Café y Narrativas de Marca

Si tuvieras que pasar una larga temporada en una isla desierta, ¿qué llevarías contigo? ¿Tu libro favorito? ¿Algún equipo para escuchar música? ¿Fotos de tus seres queridos? Quizás las tres cosas a la vez, ¿por qué no? Ahora, si me preguntan a mí, yo me llevaría mi cafetera italiana, y una larga reserva de café molido para preparar. Y es que, al igual que otras mil millones de personas en el mundo, lo primero que hago al abrir los ojos es prepararme una buena taza de café, que me ayude a transitar el día. 

Y es que, aunque parezca superficial, esta bebida, que según cuenta la leyenda, fue descubierta de casualidad por un pastor etíope llamado Kaldi, en el S. IX DC, ha evolucionado hasta convertirse en un elemento crucial en el día a día de cualquier persona en la actualidad. Y junto a esta evolución, distintas marcas y distintas narrativas han surgido para, a través del mismo producto, ofrecernos distintas experiencias.

Por eso, y siguiendo un poco la línea de nuestra última entrada en donde analizamos qué es el Brand Story y el Brand Storytelling (si aún no lo has leído, pincha aquí), aquí, y en las próximas 2 entradas, analizaré 3 empresas que, en un mercado tan competitivo como lo es el del café, han sabido, desde distintos lugares, y apuntando a distintas audiencias, construir grandes narrativas en torno a ellas, hasta convertirse en verdaderas marcas de éxito:

Starbucks, la marca que nació en Seattle y se expandió por todo el planeta, trascendiendo la mera taza de café, para convertirse en un espacio para la comunidad y la conexión; Nespresso, que con su origen Suizo, ha convertido a la elaboración del café en arte de precisión, para los paladares más sofisticados; y por último, Black Rifle Coffee Company, hecho por y para veteranos de guerra, lo que le aporta un toque patriótico y robusto, algo bastante novedoso para el universo del café. 

Así que antes de sumergirnos de lleno en el análisis, prepárate una buena taza (un chorrito de leche y 2 de azúcar), porque hoy, en The Brand Cuisine, hablamos de café y de manera más específica, de Starbucks.

PRODUCTO ESTRELLA DE STARBUCKS

Starbucks: El Origen de una Marca

Con presencia en 80 países, y más de 35 mil locales en todo el mundo, Starbucks es, sin lugar a dudas, un “Coloso” en el mercado del café. Aunque es indiscutible que sus productos, que van mucho más allá de esta bebida, son particularmente sabrosos, la pregunta central en este análisis sigue presente: ¿cómo una empresa, que comenzó como un pequeño emprendimiento de 3 amigos, en la ciudad de Seattle, en 1971, consiguió convertirse en el emporio global que es hoy en día?

Para poder contestar a esta pregunta, primero debemos conocer un poco la historia que le da origen a esta marca. A finales de los años 60’s y principios de los 70’s, muchos americanos tenían la sensación de que su experiencia en el consumo de café era bastante pobre; consideraban que habían muy pocas opciones disponibles en el mercado, y que todas era de muy baja calidad. Además, debido a los cambios culturales de esa época, el público empezaba a mostrar un interés creciente en la salud y la sostenibilidad de los alimentos que consumían.

En este contexto, 3 amigos de la ciudad de Seattle, Gordon Bowker, Jerry Baldwin y Zev Siegl, decidieron abrir una tienda boutique (el primer Starbucks de la historia) en la cual vender, al público general, entre otras cosas, granos de café de alta calidad, recién tostados y molidos. Aunque pueda parecernos extraño hoy en día, en este primer Starbucks no vendía ningún tipo de bebidas, ni siquiera una taza de café. Y es que en aquel entonces,  la cultura del café en Estados Unidos estaba orientada hacia el consumo en el hogar y en el lugar de trabajo, por lo que no eran habituales ni las cafeterías, ni el el acto mismo de ir a un establecimiento sólo para beber café (vale destacar que la gente sí bebía café en establecimientos, pero normalmente lo hacía en restaurantes o Diners , como parte final de una comida).

El modelo de negocio de Starbucks no comenzaría a tomar forma sino a partir de 1983 cuando Howard Schultz, quien primero trabajó como Director de Operaciones y Marketing, y más tarde terminaría comprando la marca, viajó a la ciudad italiana de Milán. Allí Schultz descubrió una cultura del café radicalmente distinta a la que él estaba acostumbrado en Estados Unidos. No sólo era el hecho de que la ciudad estaba repleta de pequeños cafés, sino que estos establecimientos ofrecían mucho más que una simple bebida con la cual energizarse; cumplian un rol social, una suerte de “ágora” moderna, en donde familiares, amigos y conocidos se reunían para conversar, debatir, disertar, conectar, o simplemente compartir momentos.

TIENDA DE STARBUCKS EN 1977

Café y Comunidad: La Esencia detrás del éxito

Con esto en mente, Schultz transformaría para siempre la esencia misma de Starbucks, pasando de ser un simple retailer de café tostado y molido de calidad, para convertirse en un espacio de reunión y de encuentro, en compañía de las mejores y más sabrosas bebidas del mercado (tés, cafés, malteadas, etc), al tiempo que daba inicio a una revolución en la cultura del café en los Estados Unidos, que persiste hasta nuestros días.

Dicho todo esto, y volviendo a la pregunta del inicio, podemos decir, de manera categórica, que el éxito de Starbucks no se encuentra ni en su café, ni en los granos que usa… Ni siquiera en cuán sabrosos son o dejan de ser sus croissants o cupcakes, que por supuesto tienen su incidencia. No, el éxito de esta marca es que han sabido vender, y con mucho éxito, algo mucho más valioso para los consumidores actuales, que una taza de café: Starbucks vende, por sobre todas las cosas, una experiencia. En un mundo en donde el frenesí está a la orden del día, y en el que todos nos encontramos cada vez más atomizados, Starbucks se presentan como una suerte de “oasis”, de “refugio” en medio de esta vorágine, en donde los relojes ya no controlan de forma tirana nuestras vidas, y en donde podemos permitirnos el tiempo de conectar, no solo con nuestros seres queridos, sino también con nuestra comunidad.

Esta es la razón de ser y el motivo del éxito de Starbucks. Y si uno presta la suficiente atención, se dará cuenta de que todas las acciones llevadas adelante por esta marca están enfocadas en 2 objetivos al mismo tiempo. El primero, en hacer de estos “oasis” o “refugios”, lo más confortables posibles, mediante una cuidadosa selección y disposición del mobiliario; una elección meticulosa de la música, para crear un ambiente cálido y que nos haga sentir bienvenidos; el uso del aroma a café tostado (aunque en sus locales ya no se tuesta el café), para darnos esa sensación de que nos encontramos en un establecimiento que ofrece productos “caseros”; etc. Y el segundo objetivo, en subrayar la idea de Starbucks como creador y potenciador de comunidades, mediante su política de “puertas abiertas” con la cual, cualquier persona que ingresa a alguno de sus locales, consuma o no, es considerada “cliente”; su política de contratación, la cual busca promover la inclusión y diversidad entre sus empleados;  sus programas de colaboración con comunidades agrícolas cafeteras, como las C.A.F.E. PracticesGranos de Esperanza, las cuales, al mismo tiempo, les permite seguir trabajando esa idea original de una empresa dedicada a la salud y el cuidado del medioambiente; etc.

Aunque muchas cosas han cambiado en la construcción de marca, desde sus orígenes, hasta la actualidad, es indiscutible que Starbucks ha sabido hacer una propuesta atractiva e innovadora, ya no solo para el público de los Estados Unidos, sino a nivel global, permitiéndole convertirse en el “Gigante del café” que es hoy en día.

ANUNCIO «GRANOS DE ESPERANZA»